gemido.es.

gemido.es.

Cómo el ejercicio puede mejorar el deseo sexual

Tu banner alternativo

Introducción

El deseo sexual es un aspecto importante de la vida para muchas personas, ya que puede mejorar la calidad de las relaciones íntimas. Existen diversas causas que pueden reducir el deseo sexual de una persona, como el estrés, la depresión, la ansiedad, la edad, entre otras. Una de las formas de mejorar el deseo sexual es a través del ejercicio físico.

Ejercicio y deseo sexual

El ejercicio físico tiene numerosos beneficios para la salud, incluyendo el aumento del flujo sanguíneo y la producción de hormonas, como la testosterona, que están involucradas en la función sexual. Además, el ejercicio puede mejorar la autoestima y la confianza en uno mismo, que son aspectos importantes en la vida sexual.

Cardiovascular

El ejercicio cardiovascular, como correr, hacer ciclismo o nadar, puede mejorar el sistema cardiovascular y el flujo sanguíneo. Esto puede tener un impacto positivo en la función sexual, ya que mejora la circulación sanguínea hacia los genitales y aumenta la lubricación en las mujeres. Además, el ejercicio aeróbico puede ayudar a reducir los niveles de estrés y ansiedad, que pueden afectar el deseo sexual.

Ejercicios de Kegel

Los ejercicios de Kegel son un tipo de entrenamiento del suelo pélvico que puede ayudar a fortalecer los músculos que están involucrados en la función sexual. Estos ejercicios son especialmente importantes en mujeres después del embarazo o en hombres después de una cirugía de próstata. Los ejercicios de Kegel pueden mejorar la sensación durante el orgasmo y aumentar la fuerza de las contracciones vaginales o eyaculación.

Ejercicios de fuerza

El entrenamiento de fuerza puede tener beneficios en la función sexual. Además de mejorar la apariencia física, el entrenamiento de fuerza puede aumentar los niveles de testosterona y la resistencia. Además, la construcción de músculo puede aumentar la autoestima y la confianza en uno mismo en el ámbito sexual. Pero, hay que tener en cuenta que el exceso de ejercicio también puede disminuir el deseo sexual, así que es importante encontrar un equilibrio.

Conclusiones

En resumen, el ejercicio físico tiene múltiples beneficios para la salud y, en particular, puede mejorar la función sexual a través del aumento de la circulación sanguínea, la producción de hormonas y mejorar la autoestima de uno mismo. El ejercicio aeróbico y los ejercicios de fuerza, así como los ejercicios de Kegel, son buenos para la salud sexual, aunque como todo en la vida, se debe encontrar un equilibrio y no excederse en el ejercicio. En definitiva, una vida activa y saludable puede tener un impacto positivo en la vida sexual.
  • Ejercicios cardiovasculares pueden mejorar el flujo sanguíneo
  • Ejercicios de Kegel para fortalecer los músculos del suelo pélvico
  • Ejercicios de fuerza pueden aumentar los niveles de testosterona y la resistencia
En resumen, el ejercicio físico es una excelente manera de mejorar la salud sexual y los beneficios van más allá de la función sexual. Una vida activa mejora el bienestar general de la persona.