Prevención de enfermedades de transmisión sexual (ETS) en tiempos de COVID-19
Introducción
La pandemia de COVID-19 ha cambiado nuestras vidas en muchas formas, y la sexualidad y las relaciones íntimas no son una excepción. Con el objetivo de evitar la propagación del virus, muchos países han recomendado o impuesto medidas de distanciamiento social que han afectado la forma en que las personas se relacionan sexualmente. Además, los sistemas de salud en muchos lugares se han visto saturados y los recursos destinados a la prevención y el tratamiento de enfermedades de transmisión sexual (ETS) han disminuido. En este contexto, es importante seguir tomando medidas para prevenir las ETS, especialmente debido a que algunas de ellas pueden aumentar el riesgo de contagio por COVID-19. En este artículo vamos a explorar algunos consejos para prevenir las ETS en tiempos de COVID-19.
¿Qué son las ETS?
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones que se transmiten de persona a persona a través del contacto sexual. Entre las ETS más comunes se encuentran la gonorrea, la clamidia, la sífilis, el herpes genital, el VPH (virus del papiloma humano) y el VIH (virus de inmunodeficiencia humana). Las ETS pueden tener graves consecuencias para la salud si no se tratan adecuadamente, incluyendo infertilidad, cáncer de cuello uterino, enfermedad inflamatoria pélvica y sida.
Prevención de las ETS en tiempos de COVID-19
1. Abstinencia sexual
La forma más segura de prevenir las ETS, incluyendo el VIH y COVID-19, es abstenerse de tener relaciones sexuales. Sin embargo, esta no es una práctica realista o deseable para la mayoría de las personas.
2. Distanciamiento social y uso de mascarilla
El distanciamiento social y el uso de mascarilla son dos medidas importantes para prevenir la propagación de COVID-19 y pueden reducir el riesgo de transmisión de algunas ETS. Sin embargo, el distanciamiento social puede dificultar el encuentro con nuevas parejas sexuales y el uso de mascarilla durante la actividad sexual puede resultar incómodo o limitar la comunicación emocional y afectiva que es importante para muchas personas.
3. Evaluación de riesgos y comunicación con la pareja sexual
Es importante evaluar el riesgo de transmisión de ETS y COVID-19 antes de tener relaciones sexuales y comunicarse con la pareja sobre las medidas de prevención que se están tomando. Esto incluye preguntar a la pareja si ha tenido síntomas de COVID-19 o ETS, si ha estado en contacto con personas infectadas y si se ha realizado pruebas de detección. La comunicación abierta y honesta sobre estos temas puede contribuir a reducir la ansiedad y la incertidumbre, así como a fortalecer la relación.
4. Uso de preservativo y otros métodos de barrera
El preservativo es uno de los métodos de prevención más efectivos contra las ETS, incluyendo el VIH y la gonorrea. Sin embargo, no ofrece una protección completa contra todas las ETS y su uso puede disminuir durante situaciones de estrés o incertidumbre, como la pandemia de COVID-19. Además, algunas ETS, como el herpes genital y el VPH, pueden transmitirse a través del contacto piel con piel, por lo que puede ser necesario utilizar otros métodos de barrera, como el uso de diques dentales o la limitación del contacto con áreas infectadas.
5. Cuidado de la salud sexual
Es importante seguir cuidando de la salud sexual propia y de la pareja durante la pandemia. Esto incluye la realización de pruebas de detección de ETS con regularidad, la vacunación contra el VPH y otras infecciones, y el tratamiento adecuado de las infecciones detectadas. Es posible que las clínicas y los centros de atención de la salud sexual estén operando con horarios reducidos o restricciones, por lo que es importante verificar los horarios de atención y realizar reservaciones con anticipación.
Conclusión
En tiempos de COVID-19, es importante seguir tomando medidas para prevenir las ETS y proteger la salud sexual propia y de los demás. No es necesario renunciar al sexo, pero sí es importante evaluar los riesgos y comunicarse abiertamente con la pareja sexual sobre las medidas de prevención que se están tomando. El uso del preservativo y otros métodos de barrera puede reducir el riesgo de transmisión de ETS, y es importante seguir realizando pruebas de detección y recibir tratamiento adecuado si se detecta una infección. La pandemia de COVID-19 nos ha recordado que la salud sexual es una parte importante de la salud general y que debemos seguir cuidando de ella incluso en tiempos difíciles.